La hoja de coca

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La coca está íntimamente ligada a las costumbres religiosas de las poblaciones andinas, representa la fuerza y la vida. Es un alimento espiritual que les permite entrar en contacto con sus divinidades. Para sus enemigos, la coca es causa de locura y de dependencia ...
Coca

La coca era para los nativos una planta milagrosa dotada de virtudes extraordinarias. Cuando los occidentales extrajeron la cocaína la transformaron en una arma fatal.

Sus hojas servían como ofrendas a los dioses de la naturaleza. También se depositaba en la boca de los difuntos para que tuvieran una mejor acogida en el más allá.

Los conquistadores españoles no creían en las virtudes prodigiosas de la planta, le atribuían poderes demoníacos, por el rol primordial que tenía en las ceremonias religiosas de las poblaciones vencidas. Un Consejo reunido en Lima prohibió su consumo, considerándola una costumbre pagana y un pecado. Pronto cambiaron de conducta, al constatar que los indígenas no se encontraban en condiciones para ejecutar los trabajos pesados que se les imponían, si estaban privados de coca. Entonces, decidieron distribuirles las hojas unas tres o cuatro veces al día.

Los indígenas llevaban siempre con ellos una pequeña bolsa con hojas de coca (llamada chuspa), también un pedazo de pasta hecha de ceniza de vegetales "llujkta". Mezclan un puñado de hojas con un poco de ceniza, luego lo mastican, secretando mucha saliva. Una vez ingerida, el jugo de la coca, mezclada con la saliva, produce poco a poco sus efectos: disminución momentánea de la sensación de hambre, frío y cansancio.

Las hojas de coca sirven también a los "yatiris" (aquellos que saben) para efectuar una gran parte de sus sortilegios y de sus augurios. Al arrojar la coca sobre un tejido tradicional "haguayo" preparado para este efecto, dicen poder descubrir a los ladrones y a las cosas que desaparecieron. La persona que se interroga sobre la infidelidad, la conducta o las intenciones de su cónyuge va ha consultar a un "yatiri", quien después de haber realizado varias oraciones, le entrega algunas hojas de coca que deberán ser puestas en contacto con las personas de las cuales se desea descubrir algún secreto.

Luego se devuelven las hojas al "yatiri" quien realiza una breve ceremonia, antes de dejar caer bruscamente las hojas de coca al suelo. La respuesta depende de la manera como caen. Para tener noticias de una persona ausente, conocer su salud, su conducta o sus negocios, hay que llevar sus prendas de vestir u objetos que la persona ha utilizado: se los tiende por el suelo y se arroja la coca por encima. Es preferible escoger ropa vieja que no haya sido lavada, asegurando de esta manera una mejor comunicación con las personas que las utilizaron, sin que éstas se den cuenta. De la misma manera, se dice que se puede ver la imagen de un difunto en su ropa.

La coca masticada sirve como amuleto y como ofrenda a las divinidades. Y escupiendo el jugo de la coca en la palma de la mano, con los dedos extensos y observando la manera como cae, se puede predecir el futuro. Se la siente amarga a la coca, si alguna desgracia se prepara.


Fuentes:

http://www.ecoportal.net