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El origen de la Confederación Iroquesa
El Gran Árbol de la Paz. Deganawida, Hiawatha y Tadodaho.
Según la tradición, mucho tiempo atrás, uno de los espíritus del mundo del Cielo, bajó y observó la Tierra; la encontró hermosa y decidió crear personas para vivir en ella. Antes de regresar, los reunió, les dio nombres y dijo: "Para los Mohawks, les doy el maíz; a los pacientes Oneidas, les doy las nueces y los frutos de muchos árboles; a los industriosos Senecas, frijoles; a los amigos Cayugas las raíces de las plantas que se comen; a los sabios y elocuentes Onondagas doy uvas y calabazas para comer y tabaco para fumar en los fuegos del campamento". Después envuelto en una nube de luz, se fue como una flecha veloz hacia el Sol, para reunirse con los espíritus hermanos del Cielo.
"El árbol de la Paz iroqués". Oren Lyons1, 1970. La Gran Ley de la Paz proclamada por Deganawida estableció la Confederación Iroquesa y los principios para que las cinco naciones vivieran en cooperación mutua. La ley y la autoridad religiosa están unidas, y esto esta simbolizado por el abeto que crece en la espada de la Tortuga Abuela (Tierra). Los animales agrupados en torno al árbol representan los principales clanes maternos: garza, águila, castor, lobo, oso, tortuga, ciervo, gallinago y halcón. Sus cuatro raíces extienden hacia los cuatro puntos cardinales, el árbol atrae a los pueblos en su base. |
Correspondían a un mismo grupo cultural que se dividió al emigrar desde el valle del río San Lorenzo hacia Nueva York para escapar del asedio algonquino. La fecha de la migración es incierta; cuando el francés Jacques Cartier (1491 -1557) exploró el río San Lorenzo en 1534, había al menos once aldeas iroquesas entre Stadacona (Quebec) y Hochelaga (Montreal), al volver los franceses en 1603, los iroqueses había desaparecido y en su lugar había Montagnais y Algonquinos.
Igualmente confusa es la fecha de la fundación de la Confederación Iroquesa, hay estimaciones que la indican hacia el 900 d.C., pero el consenso general es que ocurrió pocas décadas antes del contacto con los europeos. Las Cinco Naciones se mantenían en constante beligerancia, cuando estaban en peligro de autodestrucción apareció Deganawida, "El Gran Pacificador", quien con la ayuda de Hiawatha convencieron a las tribus iroquesas a poner fin a su lucha y formar una Liga.
En el Concilio convocado, Deganawida dijo: "Deben actuar para servir a los demás y estar en armonía unos con otros. Entierren sus diferencias bajo los grandes abetos, y a su sombra nunca más se caminará con temor, sino que vivirán juntos en paz y tranquilidad". Se hizo un silencio, luego los representantes mohawks y senecas, sentados al este del fuego y los oneidas y cayugas, sentados al oeste asintieron y finalmente lo hicieron los onondagas, incluido Tadodaho. Entonces el profeta habló nuevamente: "Yo Deganawida y los señores confederados, arrancaremos de raíz el árbol más grande, y en la profundidad de la tierra, en las corrientes del inframundo que fluyen hacia regiones desconocidas, echaremos todas las armas de guerra, luego lo plantaremos de nuevo."
Concebían la Confederación como una Gran Casa Comunal con cinco compartimentos donde cada nación tendría su propio fuego, una soberanía compartida en la Confederación Haudenosaunee y la responsabilidad de proteger la paz, la naturaleza y las generaciones futuras. En el centro -territorio Onondaga- se plantó El Gran Árbol de la Paz, sus ramas representaban las viviendas en las naciones confederadas y sus raíces extendidas a los cuatro puntos cardinales, invitaban a otros pueblos a refugiarse en él, como ocurriera con los Tuscarora en 1722.
La formación de la Liga puso fin a las disputas entre sus miembros, el período de paz, unidad política y militar, fue de gran prosperidad aunque no estuvo exenta de conflictos con otras tribus. La Confederación Iroquesa es tal vez el ejemplo más antiguo de las naciones que se unen bajo una sola forma de gobierno y espiritualidad (los iroqueses no hacen distinción entre política y espiritualidad).
![]() El Gran Pacificador, profeta, líder espiritual y fundador de la de la Haudenosaunee o Confederación Iroquesa. También lo encontraremos escrito como Dekanawida, su nombre significa "dos corrientes que fluyen juntas". Como señal de respeto, los iroqueses sólo mencionan su nombre en circunstancias especiales. Hijo divino concebido milagrosamente por una madre virgen de la Nación Huron, habitantes de las orillas opuestas de los Grandes Lagos. Recibió una visión del Creador: Un abeto gigante cuyas ramas más altas rompían en cielo llegando a la Luz Pura, cuatro grandes raíces lo anclaban en la tierra y una luminosa alfombra de nieve se extendía desde su base en todas las direcciones. Un águila vigilaba desde la cima. El árbol era la Hermandad de la Humanidad, de él surgiría la unión pacífica de cinco tribus indias para unirse con la luz del Creador. La paz y la luz se propagarían hasta que todos los pueblos de la Tierra estuvieran protegidos. Por no tener padre, entre los hurones siempre sería paria, por lo que partió hacia el sur en busca de la tierra en la que iba a cumplir su misión. así llegó al los espesos bosques y amplios valles que habitaban las Cinco Naciones iroquesas en lo que ahora se llama estado de Nueva York. Al ser tartamudo, necesitaba un portavoz para transmitir su mensaje, lo encontró en Hiawatha, un elocuente orador. Con su ayuda consiguió constituir la Confederación; se dice borró el sol para convencer a los reticentes, en 1451 hubo un eclipse solar visible en el norte del estado de Nueva York, sugiriendo otra fecha posible para el evento. En territorio Onondaga se plantó el Gran Árbol de la Paz y todos los elementos de guerra fueron enterrados debajo. Cumplida su misión, dijo "No volveré a ser visto, nadie me puede seguir adonde voy", abordó una canoa blanca y luminosa en la orilla del lago Onondaga y remó hacia la puesta del sol. Imagen: Lucy Dupertuis. |
Era un onondaga que había pasado a ser un jefe mohawk.
Tenía claro que las constantes disputas entre las Cinco Naciones, las llevaría a la ruina; trataba de convencer a los demás jefes de la necesidad de negociar un pacto de paz, pero se encontraba con la oposición del cruel tirano Tadodaho, jefe Onondaga, que en la coyuntura incrementaba su poder, y para acallarlo había asesinado a sus hijas.
Hiawatha, derrotado decidió aislarse en las montañas, Deganawida conocía la historia y decidió visitarlo; le describió su visión y pronto viajaron juntos para predicar su plan de paz entre las Cinco Naciones iroquesas.
La rivalidad entre las tribus era intensa, pero ahora el elocuente orador hablaba con el poder espiritual de Deganawida. En poco tiempo oneidas, mohawks, senecas y cayugas estuvieron de acuerdo en establecer una Liga de cooperación mutua, pero era necesario sumar a los onondagas, gobernados por el cruel Tadodaho ...
Imagen: Escultura de Augustus Saint-Gaudens (Estados Unidos, 1848–1907). Museo Metropolitano de Arte, Nueva York.
Tadodaho simbolizaba todas las fuerzas negativas que impedían la creación de la Confederación Iroquesa. Era un monstruo, retorcido en mente y cuerpo, se decía que su cuerpo estaba encorvado en siete lugares y las serpientes se retorcían sobre su cabeza.
Deganawida y Hiawatha se acercaron a él con amor y cantando, Tadodaho conocía y despreciaba a Hiawatha, pero esta vez su rostro que irradiaba serenidad y paz lo abrumó. El profeta le enseño el poder de la paz, la necesidad de aprender a amar, aun a los que más había temido y odiado. Poco a poco los malos pensamientos se borraron de su mente, su cuerpo fue tomando la forma humana, entonces Hiawatha retiró las serpientes que colgaban de su cabeza.
Deganawida propuso que los onondagas fueran los "Guardianes del Fuego" de la nueva Liga Iroquesa. Tadodaho se sintió honrado y estuvo de acuerdo. Su nombre es el título que llevarían los posteriores jefes onondagas, el hombre que además preside los consejos.
Imagen: Museo de Arte Nativo Americano. Reserva Tuscarora.
![]() "Árbol que Guarda la Paz en la Tierra". Manto realizado por Alice Olsen Williams. Recrea la tradicional historia iroquesa con la crisis de la ciudad de Oka, Canadá, en 1990, cuando la comunidad Mohawk de Kanesatake, se opuso a los planes de la ciudad de expandir un campo de golf y un complejo residencial hacia sus bosques sagrados. El Árbol de la Paz que emerge de la espalda de la Tortuga Abuela(Tierra) con las raíces de la paz entre las naciones iroquesas, se dispara a través del edificio del Parlamento Canadiense. Debajo del árbol los elementos de guerra están enterrados, en la parte superior el corazón del águila es un círculo con los cuatro colores que representan las cuatro direcciones, un símbolo frecuente usado por los activistas políticos de EE. UU. y Canadá.
Anishinabe, nacida en la reserva de Curved Lake, Ontario, Canadá. Hija de madre Anishinabe y padre noruego. En el diseño de sus mantas incorpora diseños con las creencias y tradiciones nativas y protestas por las desigualdades sociales. |
1 Oren Lyons (Jo Ag Quis Hi)
Nació en la Reserva Onondaga, Nueva York en 1930. Pertenece al Clan de la Tortuga.
Jefe espiritual onondaga. Sirvió en el ejército y en 1958 se graduó en la Universidad de Siracusa donde fue un destacado jugador de lacrosse.
En 1970 volvió a la reserva como jefe y desde entonces ha sido uno de los más grandes abogados de la causa iroquesa. En 1982 tomó parte en Ginebra en la Comisión de la ONU de los Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas, y estableció un Grupo de Trabajo de los Pueblos Indígenas. En 1990 fue mediador en la crisis mohawk con los gobiernos canadiense y quebequés. Es un firme defensor del medio ambiente. Ha escrito Dog story (1973) y Exiled in the land of the free: democracy, indian nations and the US Constitution (1992).
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Fuentes: